HISTORIA
ABERG
La Ciudad del Agua
Una maravilla de ingeniería que incluso los elfos eldar admiran desde su hogar; arquitectónicamente es una de las ciudades más hermosas de Thinis, sus calles fueron sustituidas por canales de forma que el agua ha estado, está y siempre estará presente en su vida. Coronada con el castillo del antiguo señor de Atenvia, Aberg ofrece una visión majestuosa de una ciudad rica, exitosa, comercial pero también turística. Es reconocida por sus magníficos tapices, que decoran las casas de la mayoría de los nobles de Eainiviel, incluida la casa Imperial que posee uno de varios metros de longitud en la que se explica la historia del Imperio hasta el tatarabuelo de Lyrica. Otra parte de su economía proviene de los numerosos astilleros en la boca del río, lejos de la zona urbana pero que tienen gran tradición y son motivo de orgullo para todas las familias que viven del negocio; sus aguas cristalinas son aptas para el baño y una gran atracción turística.
La ciudad mestiza
Popularmente se la conoce así porque es el único territorio dentro del Imperio con elfos eldar residentes, representando casi el 40% de la población de Aberg. Son responsables de la arquitectura de sus edificios pre-imperiales más importantes, como el Museo del Agua y trabajaron duramente en la reconstrucción de los canales después de la guerra de conquista de Harold Vrakha. Aunque en su sociedad el trabajo es para la comunidad o por entretenimiento se han adaptado bien a los humanos con trabajos como todos los artísticos (como era obvio), banqueros y arquitectos.